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Era la  Nochebuena,… en aquel bosque de Noya los árboles estaban tan tristes que casi se los oía llorar….el Sr. Noya que deseaba mucho verlos felices se acercó al Sr. Pino Mayor y le preguntó que les pasaba

- Estamos desnudos, no sabemos como cubrir nuestras ramas ...y ya no podremos ser los  árboles de la Navidad They wished very much to keep Christmas, but they did not know how to do so……

 

El Sr. Noya llamó a sus otros duendes amigos

- Están tan desnudos …no tienen sus ropas verdes dijo el Duende Ramón

 

- Están tan tristes….no tienen color

dijo el Duende Picasso

 

- Están tan solos …. Sus ramas son tan cortas que no pueden hacer la ronda de Navidad dijo el Duende Verde Seducción

 

Era tanto el parloteo que el Sr. Noya los mandó a dormir, ya era tarde y se acercaba la Nochebuena

 

Pero los Duendes no estaban solos en el Bosque, las hadas estaban escuchando y entre sonrisas dibujadas con puntas de fantasía y al amparo del calor de las estrellas decidieron que no debían perderse las ilusiones de los niños … así que con las gotas de rocío que encontraban iban formando un Arco Iris ...con el polvo que caía de las estrellas armaban guirnaldas y cubrían los pinos que entibiados por tanta luz empezaron a resplandecer,....como tenían tiempo llamaron a los pájaros de pecho blanco que al volar sobre los árboles dejaban caer un suave manto de plumas de un blanco iluminado,  y como aún tenían un poquito más de  tiempo entraron en los sueños de las personas y les enseñaron la maravilla de soñar.

 


Así que en la mañana de Navidad, cuando los Duendes despertaron, se dieron cuenta que las Hadas , los pájaros de pecho blanco y las fantasías y las realidades unidas habían hecho el milagro….los árboles volvían a ser felices, eran nuevamente los Árboles de la Navidad .

 

 

Textos de: Mora Carcacía

Los Arboles de la Navidad

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